Las claves de Miao Yin. Personas altamente sensibles

Las claves de Miao Yin. Claves para eliminar la ansiedad

 

Grupo de pirañas agresivas. Pesadilla.

Sufrir ansiedad es uno de los problemas más comunes que se conocen en la actualidad. Como puedes ver en la ilustración que he elegido representa la violencia con la que esta enfermedad mental puede atacarnos a cualquier edad, en cualquier momento y de la que debemos aprender a gestionar para controlarla  evitando que nos produzca otras secuelas. 

Los síntomas que puede dar la ansiedad son: estrés, angustia, nerviosismo, dificultad para respirar y para dormir, tensión, ataque de pánico.

¿Qué es lo que la provoca? La inseguridad, presión, preocupación, pánico,  baja autoestima,  incertidumbre,  negatividad,  falta de autocontrol,  falta de valor e  inconsciencia.

Ahora llega el momento en el que puedas pensar: "Yo no soy una persona insegura o tampoco negativa, yo no siento presión para hacer algo ni soy un inconsciente". Eso son cosas que son difíciles de asumir o reconocer porque no somos del todo conscientes ante algunas situaciones y muchas veces pensamos de una forma pero reaccionamos de otra muy diferente. Bien porque lo hacemos de una forma automática sin darnos cuenta o quizá porque nos escondemos y queremos creer algo que no somos en realidad, en definitiva: nos engañamos a nosotros mismos.

Claves para eliminar la ansiedad

  • Pregúntate ¿por qué? , ¿qué necesidad tengo de ponerme en un estado que me incapacita  para pensar o intentar resolver los problemas que tengo delante? Es lógico que se presenten amenazas o obstáculos en mi camino por lo tanto ¿por qué no voy a ser capaz de superar esos contratiempos?, ¿Y si no puedo hacerlo? Pero si he llegado hasta aquí por qué no voy a poder continuar si es lo que yo quiero. El hacernos preguntas consigue que obtengamos información sobre nosotros mismos, que pensamos o creemos y nos obliga a ser conscientes de cada momento en el que nos encontramos. 
  • Mantener la calma.  Algo tan sencillo pero tan complejo a la vez. Si presumes de poseer control de tus emociones demuéstralo y párate en seco. A continuación se trata de analizar que es lo que está sucediendo o lo que sabes que puede ocurrir en un futuro inmediato ( dentro de media hora, por ejemplo) y sé objetivo, es decir, reconoce las cosas como se presentan y no las enmascares. Si son buenas y te favorecen, perfecto pero si es todo lo contrario asúmelas y aprende de ellas porque te pueden ayudar a mejorar. De nada te va a servir gritar, enfadarte, despotricar o deprimirte sino de perder el tiempo y ganarte una pésima reputación. Ante la presión en el trabajo, familiar o financiera tenemos que aplicar la tranquilidad, eso ayudará a que mantengamos un equilibrio mental saludable. Sufrir tensión hace que acabemos enfermando y nada de eso vale la pena si al final, no vamos a disfrutar.
  • Cancela. Todo fluye en tu mente constantemente tanto los buenos pensamientos como los malos. Cuando te veas en medio de un proceso de análisis mientras adoptas la conciencia plena de ese momento y detectes un pensamiento negativo cancélalo de inmediato, sustituyéndolo por uno positivo que te ayude a continuar. Un ejemplo: Imagina que llegas a casa y te das cuenta que por despiste te has dejado las llaves dentro de casa. La primera respuesta que recibes de tu pensamiento es la queja y comienza el proceso de enfado hacia ti mismo, ante las circunstancias que te han producido sufrir ese despiste etcétera, etcétera. ¿Qué será lo siguiente que hagas?, ¿llamar a un cerrajero y pagar una factura que no tenías planeada en tu presupuesto mensual? Es el camino más rápido pero sin duda te deja una buena huella en tu bolsillo...Hacerte preguntas en estos momentos es esencial para tener una buena idea. ¿Convives con alguien más que pueda abrirte la puerta sin necesidad de gastarte dinero? Sí pero puede que llegue más tarde porque tiene otro horario de trabajo. ¿Puedes acercarte hasta su trabajo y pedirle que te deje las llaves para evitar las molestias? A lo mejor sí  que puedes. ¿Puedes llamarle y explicarle lo ocurrido para que te ofrezca su ayuda? Tal vez sí.... "Ya, pero si lo llamo se enterará, me criticará  y me lo reprochará cuando menos me lo espere"... ahí has de cancelar. Estás en frente de un pensamiento negativo que te limita y no te permite solucionar este problema. Por lo tanto ¿te das cuenta que mientras te has hecho las preguntas has tenido que parar un momento y mantener la calma?, ¿te has dado cuenta que has sido objetivo y consciente de la situación y has sido capaz de reflexionar de forma inteligente apartando el nerviosismo?  A eso se le conoce como ser resolutivo. A muchas personas les ayuda verbalizar las palabras: cancela o silencio ante estados de estrés de la misma forma que realizar una respiración profunda. 
  • No puedo hacerlo. Esta es sin duda la frase más limitativa que existe en el mundo entero. A ver... ¿lo has intentado? Dependiendo de la situación a la que te enfrentes puede ser que tu mismo te sorprendas y compruebes que al final con o sin esfuerzo has podido realizar esa cosa que parece costar tanto a primera vista. Para todo se necesita un aprendizaje, está claro que sí pero una vez recibido y asimilado has de ganar confianza en ti mismo e intentarlo. Hay muchas mujeres que temen ser madres por miedo al proceso de embarazo y posteriormente a criar a sus hijos. También hay personas que temen a vivir por tener que enfrentarse a los problemas que puedan obstaculizar su camino. En esta vida no nos podemos acobardar ante posibles amenazas porque sino no descubriríamos las cosas que pueden darnos la felicidad. Hay que afrontar los miedos, saltar las barreras y superar aquello que nos ha hecho sentir mal para seguir avanzando y reforzar nuestra forma de ser ya que, si no lo hacemos así en un futuro, nos arrepentiremos de no haberlo intentado. Tenemos que aprender a no dejar llevarnos por un exceso de presión ya que ésta está para mantenernos alerta y emprender una tarea en un plazo concreto pero no para que nos afecte hasta tal punto que nos impida realizarla. Si nos angustiamos nuestra mente se bloqueará y será incapaz de seguir adelante.
  • El poder del sí. La mayoría de personas que sufren ansiedad suelen atrincherarse para protegerse de lo que les rodea y la palabra no es la más utilizada. Para ganar confianza en uno mismo hay que ser positivo y para ello tenemos que aprender a abrirnos a nuevas oportunidades. Hacer amistades, apuntarnos a nuevas actividades, visitar centros de cultura, viajar, estudiar cosas nuevas que nos permitan crecer y evolucionar, descubrir sabores nuevos, cuidarnos mejor, atrevernos a cambiar, adaptarnos a nuevas situaciones, apostar por la esperanza  y la ilusión, creer que podemos conseguir lo que nos propongamos, intentar esforzarnos en resumen, continuar avanzando. Otra de las cosas que suelen ocurrir es que nos encontramos la mayoría de las veces con un no desde el principio: " No lo vas a conseguir", "Eso es muy difícil", "No te van a hacer caso"... Yo soy de esas personas que sabiendo que ya parto de un no busco el sí. Investigo la manera de llegar hasta él, lo intento con las herramientas que pueda necesitar y no me detengo hasta probar alguna opción. Gracias a la iniciativa he conseguido cambiar muchos noes por síes.  Y si yo he podido, tú también eres perfectamente capaz.
  • Destierra el pánico. Esa emoción te impide disfrutar de las cosas. Tras analizar la situación que tienes frente a ti y plantear la objetividad, cancela ese pánico y transfórmalo en algo positivo como iniciativa, entusiasmo, valor. De ese modo podrás obtener buenos resultados. Descubrirás hasta donde eres capaz de llegar y te conocerás más a fondo. Simplemente haz las cosas con cuidado y mucha atención. Madurar se trata de adaptarse a nuevas circunstancias, de aprender y superar obstáculos y evolucionar para descubrir una mejor versión de ti mismo. 
  • Baja autoestima.  La inseguridad provoca baja autoestima. Existen personas que no se sienten satisfechas con su aspecto físico o estético.  Además, por si fuera poco, acaban creyéndose que no valen para nada y eso hace que pierdan el interés y la ilusión por vivir. Cada uno posee unos rasgos especiales y un físico que le ayuda a poder realizar las actividades que necesita para conservar una buena salud. Con eso ya tenemos que sentirnos felices. Hay que quererse tal y como uno es. Así que ten presente que has de trabajar diariamente para sacar el mejor partido de ti mismo de una manera sencilla y auténtica  porque eres único y nadie es mejor ni peor que tú. 
  • La inconsciencia. Esta se produce de forma continua, cuando hacemos las cosas sin pararnos a pensar en las consecuencias. Es más habitual de lo que parece. Para evitar que eso se produzca hay que pararse y analizar cada momento que requiere una acción, lo siguiente es decidir qué es lo más adecuado y realizar el paso que creamos correcto. Las prisas, los nervios, pensar en varias cosas al mismo tiempo hace que reaccionemos y nos dejemos por el camino un rastro de despiste, olvido y  equivocaciones que más tarde nos tocará de rectificar. 
Espero que con estos pasos aprendas a gestionar la ansiedad y consigas que desaparezca poco a poco. De esa manera acabarás sintiendo el control de ti mismo y podrás hacer las cosas como realmente quieres y no bajo impulsos irreflexivos.  Aplica la conciencia plena en tu vida diaria y obtendrás muchos beneficios para la salud mental.


Imágenes: 8385. Pixabay.com



Comentarios